viernes, 7 de octubre de 2016

SUMA CONTRA LOS GENTILES


Reseña N° 3

Reseñador: Milton Guiovany García Díaz

Fecha: 21 de septiembre de 2016
1. DATOS DE PUBLICACIÓN
AUTOR:  Santo Tomás de Aquino
TÍTULO:  La suma contra gentiles capítulo II al VIII de libro I
CIUDAD: Madrid
EDITORIAL: Alianza
PÁGINAS:
2. TEMA
La demostración para los no creyentes de las verdades divinas a partir de la razón natural.
La afinidad existente entre las verdades de razón humana y la fe cristiana.
3. PALABRAS CLAVES
Razón natural, grados de conocimiento, verdad, conocimiento natural, substancia.
4. PROBLEMA
¿Cómo explicar desde la razón natural las verdades de la fe cristiana a los no creyentes?
5 TESIS
Es mejor conocer algo de la Substancia Divina por la fe, que no saber nada por medio de la inteligencia humana.
6. ARGUMENTOS DEL AUTOR
Capítulo II
La forma más perfecta que el hombre encuentra para llegar a la inmortalidad es, según Santo Tomas, el estudio de la sabiduría, porque por ello es que el hombre estrecha las relaciones entre Dios y consigue un grado más perfecto de semejanza con Dios.

Capítulo III
Para el doctor Angélico existen dos tipos de verdad: las que se conocen por la vía de la razón exclusivamente y las que se sobrepasan las capacidades de nuestro entendimiento.

Santo Tomás de Aquino explica sus consideraciones epistemológicas a partir de tres grados de conocimiento: el primero que se basa en el conocimiento alcanzado gracias al intelecto del hombre como un ascender intelectual hacia Dios; el segundo, es un conocimiento más cercano o noble de la substancia(esencia) de Dios; el tercero, el más perfecto de la triada, que se explica por la Divinidad misma.

Frente a la primera demostración epistemológica radica en el principio de la demostración, en la captación de la esencia(substancia) que para el conocimiento natural no tiene mayores retos. El problema radica cuando el hombre quiere demostrar bajo este principio, verdades o realidades que sobrepasan las facultades del intelecto y que necesitan de la fe para poderse explicar.

Es verdad que el conocimiento del mundo, en santo Tomás, parte de los sentidos y que lo que no pasa por la experiencia no es aprehendido y que por tanto llegar a entenderlo resulta una tarea difícil. Sin embargo, por los sentidos el ser humano puede alcanzar conocimiento mínimo o inferior acerca de la existencia de Dios, pero las cosas no tienen lo que el hombre requiere para llegar a las verdades divinas más elevadas, es decir que la razón en este caso es sobrepasada por la Substancia Divina y que su conocimiento exclusivo resulta inferior e indigno al que la fe otorga.

Si existen retos en el conocimiento del hombre hacia el mundo, muchas más son las dificultades para conocer la esencia de Dios. El ejercicio se propone no rechazar de tajo las verdades relacionadas con las substancias divinas, sino que se encarga de demostrar cómo a pesar de esas dificultades en el intelecto, se puede en realidad conocer algo de ellas, se trata de demostrar que hay verdades acerca de Dios que son accesibles a la razón y que pueden llevar a creer a los hombres.

Capítulo IV
 La razón natural permite acceder al conocimiento de las verdades de fe

Frente a las verdades de fe existen dos consideraciones: las que se pueden conocer mediante un esfuerzo del intelecto humano y las que definitivamente, por más que el hombre ponga todo su esfuerzo intelectual en comprender, no logra entender, porque sobrepasan sus capacidades. Estas son las que exigen la inspiración(fe) para llegar a creerlas.

Conocer las verdades alcanzadas por la vía de la razón, exige un alto grado de disciplina con la investigación, pero Santo Tomás expone tres ideas por las cuales el hombre que cumple con ese rigor necesario tiene problemas para conocer: primero, que pocos hombres llegan a conocer a Dios por tres causas (Los impedidos físicamente, los que se dedican a los bienes materiales y los que tienen pereza); el segundo consiste en largo proceso de aprehensiones previas al conocimiento de las verdades dedicadas a Dios; en el último, se da una falla en el proceso de discernimiento dentro del proyecto de investigación que por debilidad podría llegar a dudar aun cuando las demostraciones sean evidentes o, que en la demostración, haya por probabilidad una confianza que no permita ver algún error que exista en lo que se considera verdadero. Concluye afirmando que resulta un ejercicio que fortalece al hombre cuando por medio de la razón busca llegar a descubrir las verdades relacionadas con Dios.

Capítulo V
Lo que nuestra razón no entiende se manifiesta por la fe para ser creída

Todo hombre tiene una inclinación a bienes mayores o superiores a las capacidades del intelecto, solo el cristianismo ofrece bienes que son mejores porque muestran el camino hacia la eternidad, son bienes espirituales, y son verdades que superan la razón.

Como esos bienes de que habla Santo Tomás superan las facultades humanas, entonces propone la fe católica, como vía que lleva al hombre a obtener un conocimiento de Dios, y con ello demuestra que la fe sobrepasa el conocimiento natural y recurre a considerar que cuando el creyente propone una verdad, considera que el conocimiento de Dios está más allá de todo lo que nuestro intelecto puede pensar acerca de Él.

Sostiene además que la fuente del error de quienes se niegan a creer en bienes superiores a los materiales radica en el orgullo por lo que sugiere eliminarlo para que el hombre sea capaz de reconocer que hay verdades que superan el entendimiento humano y que solo pueden aprenderse por la fe como bienes superiores. El hombre de dedicarse al estudio de los bienes mejores, aunque no logre aprender toda la substancia de la Divinidad. Aun cuando las verdades acerca de Dios sean tan limitadas, esa labor perfecciona el alma y la razón, la pulen y la hacen más pura, por lo que es mejor saber algo acerca de los bienes superiores que no tener conocimiento de Él.

Capítulo VI

Dios en su sabiduría, se encargó de manifestar a los hombres verdades que no puedan aprender (resurrección, curaciones, milagros, etc.) porque exceden la naturaleza, de forma que solo por la inspiración (Revelación) del entendimiento humano, es posible que los hombres más sencillos y poco ilustrados sean capaces de tener mayor sabiduría acerca de Dios que inclusive el hombre más docto. Por lo que plantea Santo Tomas que el milagro más grande es que el alma humana pueda acceder a las verdades superiores como bienes espirituales por gracia de la fe.

A esta doctrina habla de los gentiles que, en boca de Santo Tomás, son grupos que conducen a tener un conocimiento natural basada solo en la razón natural y no considera la intelectualidad del hombre que le lleva a desear los bienes superiores.

Capítulo VII
La verdad racional se relaciona con la fe cristiana

Se explica que no porque la verdad católica supere la capacidad intelectual del hombre, entonces sean irreconciliables la una con la otra. Lo argumenta a partir de los siguientes postulados: El conocimiento de las cosas ha sido infundido por Dios porque fue cien creo el mundo; que la sabiduría contiene los principios de la naturaleza y que todo lo que se opone a eso principios está contra las verdades divinas. Entonces las verdades que obtiene el hombre por revelación, no pueden ser opuestas a la razón natural, porque el hombre no aprende si hay contradicciones entre la fe y la razón. Entonces fe y razón son vías para conocer las verdades de las cuales hemos venido hablando.

Como la naturaleza no tiene cambios, no tiene lugar para las contradicciones acerca de Dios, sino que Él inspira al hombre la fe como algo que es afín al conocimiento natural y que son conseguidos por el mismo hombre.

Capitulo VIII
Las relaciones entre intelecto del hombre y las verdades de fe
El proceso del conocimiento racional inicia en las cosas del mundo, que tienen un rastro de lo divino, después de todo los efectos se parecen de forma imperfecta a las causas, pero que no alcanza para que el hombre pueda conocer las verdades de Dios. Entonces para conocerlas el intelecto se vale de las semejanzas, pero, aun así, no son suficientes para explicar de forma evidente, lo cual si puede hacer desde la fe. Mediante este ejercicio consigue la humildad para saber que su razón resulta débil ante la magnificencia de Dios.



7. COMENTARIO CRÍTICO DEL ESTUDIANTE

De acuerdo al capítulo II el hombre llega a la inmortalidad por medio de la adquisición de sabiduría divina, sin embargo, la inmortalidad no se obtiene por este hecho, sino por la expiación divina del salvador la cual ofrece la inmortalidad a todo ser que lleve a la práctica el contenido de su fe. El hecho de llegar a conocer mejor a Dios si se llega por medio de la revelación. Mas, sin embargo, el intento del doctor angélico por reconciliar fe y ciencia parece en nuestros días haber pasado de tiempo porque para la ciencia moderna su interés mayor resulta ser todo aquello que sea tangible, medible, cuantificable, demostrable, se entienden los fenómenos, pese a las ciencias sociales que buscan explicar los fenómenos como comprensiones de la realidad.

La verdad de las cosas se adquiere según Santo Tomás por vía de la razón y las que sobrepasan el entendimiento se aprenden por medio de la fe. El conocimiento se adquiere por medio de la búsqueda de la verdad, en un proceso que ilumina la mente y da una comprensión a todo ser que desea los bienes superiores. Ningún conocimiento viene sin la luz divina y esta proviene emanada de Dios. Siembargo, cada quien debe buscarla, no es un don gratuito, ese don permite incrementar la fe, el cual es el primer principio del evangelio, este principio por supuesto indica que capacidad de creer en algo que no se ha visto de llega, se desarrolla y puede aumentar en el hombre por medio del conocimiento adquirido y en la esperanza en lo que no se ve.

Este hecho de estrechar las relaciones entre fe y ciencia, también marcan una moral que busca siempre el bien mayor, hablando de las cosas que trascienden la humanidad, mientras que en nuestros días el referente ético y moral, cambia permanentemente sin considerar la unidad de los principios y lo que ayer estaba bien en los actos humanos, hoy puede pasar ante algunos hombres como objetos que no satisfacen sus ideas de bondad, tal vez en la cotidianidad del mundo estos hombres hemos olvidado un referente trascendente, y se ha dedicado al material, se han convertido en los gentiles de nuestra época.

No hay comentarios:

Publicar un comentario